Nos prometió larga vida
266
Pero seamos buenos soldados. La Biblia dice que debemos soportar dureza como buenos
soldados. (2 Timoteo 2:3) Sí, la maldición está aquí abajo. Sí, tenemos que limpiar todo cada día,
nuestros cuerpos están envejeciendo y tenemos mucho con que lidiarr. Estan los diablos y la
gente loca y ataques, y tenemos que creer para que nuestras necesidades sean suplidas. Pero
también estamos en la línea del frente, donde está ocurriendo. Estamos donde está la acción, y
nuestro tour del deber sólo dura un par de horas. Vamos a poner nuestro rostro como pedernal.
¡Resistir dureza. Vamos a hacer este trabajo. Vamos a decirle a todos lo que podamos acerca de
Jesús. Vamos ayudarles que entren en la salvacion, tantos como podamos. Vamos a ayudar a
todos y animar a todos lo que podemos, porque pronto estaremos fuera de aquí de todos modos,
en un período muy corto de tiempo. Cuando las cosas se ponen difíciles, todo el mundo quiere
volver a casa. Pero alguien tiene que quedarse y ganar la batalla.
Di en voz alta:
Yo puedo soportar dureza.
Yo puedo hacer todas las cosas en Cristo que me fortalece
.
El continuo diciendo en el versículo 23, "porque estoy en un estrecho entre dos, teniendo deseo
de partir y estar con Cristo; que es mucho mejor: sin embargo permanecer en la carne es más
necesario para ti. "
El llegó a pensar en eso, y dijo: "Me necesitas". Verso 25 continúa, " Y confiado en esto, sé que
quedaré, que aún permaneceré con todos vosotros, para vuestro provecho y gozo de la fe”.
Tenemos registro de cuando él decide que no va a ir ahora, que se va a quedar.
Hay todo tipo de teólogos que diran: "Pablo, no depende de ti. Ese no es su opción", pero
ignoran la Biblia. Yo acepto esto.
Usted y yo tenemos una elección. Podemos irnos temprano o podemos quedarnos. Tenemos una
opción.
"¿Y si me dicen que soy terminal y yo tengo que morir en tres meses?" Tienes una opción. Gente
te dirá que no tienes una opción, pero la Biblia dice que usted tiene una opción.
No hay nada más grande que Dios. Tienes una opción.
Esta hermana que mencioné antes era mayor, y todo el mundo había renunciado a ella. Decian
que si una cosa no la mató, estas otras dos cosas lo harían. Pero ella se agarro del Salmo 91:16.
Nunca lo olvidaré. Por eso te lo cuento. Vi ese brillo en los ojos. Probablemente pensó,
"travieso," porque yo le pregunté, "¿seguro que no hay otra cosa que quieres hacer? ¿Estás
seguro que estás satisfecha?"
Ella me miró como, "Bueno..." Y lo sabía, sabía que se estaba convirtiendo en ese momento.
Bastante seguro, aunque ella había tenido una hemorragia, y la estaban alimentando a través de
tubos y ella no podía comer y estaba postrada en cama, te lo aseguro, en cuestión de días, la
mujer estaba en casa comiendo sola. Se levanto en la iglesia apenas una semana después para